En resumen No se puede ir a Río de Janeiro sin dedicar unas horas para visitar el Corcovado y la famosa estatua del Cristo Redentor, que vigila la ciudad desde lo alto de sus 709 metros de altura.

Paradas principales

Laranjeiras
Corcovado
Estatua del Cristo Redentor
Floresta da Tijuca

El programa

Desde el puerto nos dirigiremos hacia el barrio de Laranjeiras a través del centro de la ciudad. Una vez llegados a la estación de Cosme Velho, subiremos al tren que nos llevará hacia el Corcovado hasta llegar al pedestal de la estatua del Cristo Redentor.
La estatua, el símbolo más importante de Río de Janeiro, pesa 1145 toneladas, está construida de piedra y hormigón y se alza a 30 metros de altura. Se encuentra en la cima de una montaña a 709 metros de altura, erguida sobre un pedestal de 8 metros. Disfrutaremos del maravilloso panorama de 360 grados sobre la ciudad, las playas, la bahía de Guanabara y el Pão de Açucar (Pan de Azúcar).
Durante el descenso en el tren turístico observaremos la Floresta da Tijuca, con su agradable y hermosa vegetación, una de las mayores reservas forestales urbanas en Brasil.

Conviene saber

El trayecto hasta el Corcovado dura 20 minutos aproximadamente.
En el caso de afluencia masiva en las estaciones, habrá que esperar un poco antes de subir al tren turístico.
Los ascensores y escaleras mecánicas para llegar al Cristo no funcionan en caso de mal tiempo.
En caso de mal tiempo, las vistas panorámicas podrían reducirse.
En el caso de afluencia masiva en la estación de tren, es posible que el ascenso o descenso del Corcovado se haga en autobús.
Durante los días de Nochevieja el acceso a la playa puede estar restringido y el recorrido panorámico puede sufrir modificaciones sin previo aviso.
Durante las fiestas de Año Nuevo y Carnaval, el paseo panorámico por las playas no estará garantizado.