En resumen

¿Preparado para escuchar el susurro de las palmeras y el tintineo de las semillas de argán? Paradise Valley no es solo un nombre, es una promesa: cañones salvajes, piscinas naturales esculpidas en la roca y un oasis secreto que ni siquiera Instagram ha descubierto aún. ¡Aquí, la aventura está garantizada!

Paradas principales

Paisajes que dejan sin palabras.
Caminata entre rocas y palmeras.
El argán que no se unta, se degusta.

El programa

¡Todos al autobús! La primera parada te regalará una vista impresionante de las Palm Groves, donde las copas verdes de las palmeras se mecen con el viento como un ejército de abanicos gigantes. Y esto es solo el comienzo.

Luego, toca bajar por un sendero que pondrá a prueba tus piernas… y tus ganas de aventura. Paradise Valley no se conquista fácilmente: ¡sus paredes de roca se alzan como catedrales naturales, sus piscinas de agua turquesa te desafían para que te bañes y reina un silencio tan absoluto que te sientes casi un intruso!

Tras conquistar el cañón, llega la recompensa: un té moruno recién hecho; parece un susurro bereber, servido en un oasis suspendido en el tiempo.

Y, por último, la fábrica de Argán. Aquí descubrirás cómo, a partir de un pequeño hueso, nace el legendario "oro líquido". Podrás probarlo en su versión más pura y escuchar a las mujeres bereberes compartir los secretos de un arte transmitido de generación en generación.
¿Sabías que se necesitan 30 kilos de semillas para obtener un solo litro de aceite de argán?