El hijo ilustre
Madeira es la isla de Cristiano Ronaldo. El campeón portugués nació y creció en Funchal y nunca cortó la relación con su ciudad natal. Un museo recorre su carrera y expone algunos trofeos. Gracias a la realidad aumentada, podréis incluso jugar y hacer fotografías con él.
La capital
Funchal es la ciudad más poblada y el corazón de la isla: aquí encontraréis numerosas atracciones como iglesias, museos y jardines tropicales. Descubrid el pintoresco barrio Monte y luego bajad usando los “cestinhos”, especie de trineos en forma de cesto. Mientras visitáis el centro de la capital, podéis aprovechar para realizar una degustación de Madeira, el vino que ha hecho famosa la isla en todo el mundo.
Laurisilva
Es el bosque autóctono de Madeira, un tesoro bio-cultural que en 1999 fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. En las 22 mil hectáreas presentes en la isla podréis descubrir una gran diversidad de fauna y flora, como algunas especies raras de orquídeas, además de laureles, tilos, helechos, musgos y líquenes. También la naturaleza hará que vuestras vacaciones sean inolvidables.