De todas las islas de Camboya, Koh Rong, frente a Sihanoukville, es probablemente la más famosa y la más desarrollada. Y sin embargo, este paraíso aún conserva una variedad de paisajes vírgenes y salvajes que te dejarán sin palabras.

Bienvenidos a Koh Rong, una isla que se eleva a unos pocos kilómetros de la costa de Sihanoukville y que a menudo se describe como un pequeño paraíso natural. Desde su costa con arenas finas que descienden suavemente hacia las aguas turquesas del océano, hasta sus característicos pueblos ricos en historia y tradiciones, hay mucho que ver aquí para el turista que quiera ponerse un par de zapatos cómodos y lanzarse de cabeza a la aventura.

Comencemos por las playas: hay que hacer una visita a Koh Toch Beach, la playa más famosa de todas, caracterizada por su arena blanca y un clima de cuento de hadas, que se ha hecho famosa por las fiestas que se celebran en los distintos locales de la costa. Aquí puedes disfrutar de deportes acuáticos como el buceo, el snorkel, el kayak y mucho más. También merece la pena ver White Beach, una hermosa playa donde tomar el sol y refrescarte con un coco helado es un verdadero placer. Si prefieres un clima más relajado y apartado, ve a Long Beach, donde la costa está rodeada de una exuberante selva de palmeras y podrás saborear el verdadero significado de la palabra silencio. Muchos lugares de la isla de Koh Rong, como Long Beach, están a poca distancia. El camino que lleva allí es particularmente empinado, pero ofrece un escenario emocionante digno de fotografar.

También hay un Parque de aventuras, el High Point Rope Park, donde puedes recorrer zonas de la isla por puentes colgantes, paseos con cuerda y tirolinas a través de la naturaleza: ¡experimentar esta pura adrenalina!

Si pasas por Koh Rong, puedes sumergirte en la cultura local haciendo un recorrido por la aldea de Sok San, un hermoso centro rural con una inmensa playa que recientemente ha abierto sus puertas al resto del mundo. Trae contigo zapatos cómodos, una mochila y un gran deseo de conocer la vida camboyana: serás recompensado con momentos increíbles.

Roh Kong es el destino perfecto para aquellos que quieren devolver algo a la isla que visitan, como unirse a uno de los muchos grupos de limpieza de la playa o la selva para conocer gente nueva y limpiar parte de la costa para restaurar su belleza original. ¡La generosidad siempre vale la pena!